La primera cerveza creada por Inteligencia Artificial
Se lanza, bajo la marca alemana Becks, la primera cerveza generada por Inteligencia Artificial con un resultado espectacular.
Traemos a esta pizarra de innovaciones e ideas de Kanpai! una noticias relacionada con la cerveza. Se trata de una comunicación fallida y, probablemente, con no pocos recursos detrás.
Becks es una marca sobradamente conocida. Es la cerveza lager por antonomasia en el norte de Alemania, una cerveza natural de Bremen, y que se ha extendido por el mundo. Becks domina el mercado cervecero de ciudades como Berlín o Hamburgo. En opinión de muchos alemanes, está lejos de la organolepsia de las prestigiosas marcas del sur del país. Es la cerveza a beber cuando no queda otra opción, directamente de la botella y muy asociada a la noche.
El asunto es que Becks decidió sumarse a la marea de la Inteligencia Artificial (aprovechando que está en boca de todo el mundo), en lo que presentaron como un desarrollo innovador: la primera cerveza creada por la Inteligencia Artificial. Lo concibieron como una acción de PR, con envío a medios especializados y generalistas de un original pack presentador parlante.
¿Para qué lo hicieron? Imaginamos que para apuntalar la imagen de compañía innovadora y precursora de las tendencias.
¿Con qué resultado? Con uno que, de primeras, podríamos calificar como muy bueno. La IA obtuvo una cerveza estupendamente valorada por aquellos que pudieron catarla. De hecho, el resultado superaba organolépticamente a la Becks original (que, no lo olvidemos, es la que realmente comercializa la cervecera de Bremen). No fueron pocos los bloggers que ensalzaron la nueva Becks IA desde diversos aspectos (el equilibrio de aroma y sabor que Becks nunca antes había tenido o la consistencia de la corona de espuma frente a la espuma menos densa de la Becks de toda la vida).
La comunicación posterior al lanzamiento de la nueva Becks IA provoca un efecto indeseado.
De algún modo, este ejercicio de jugar con un monstruo tan grande como la IA puso sobre la mesa todas las debilidades a nivel de producto de la Becks de siempre, racionalizando por qué se sitúa lejos del pódium de las cervezas preferidas por los alemanes. Todo ello provocó un efecto burla entre esos mismos líderes de opinión que habían manifestado que la nueva Becks estaba realmente rica. Algo que ejemplificamos en la cata comparativa efectuada por Jonathan Chadwick, experto en bebidas del Daily Mail. Traemos para vosotros la noticia extraída del ese medio británico.
Lo dicho: no hubo medición de riesgos y algo salió mal.
Volvemos en este post a algo que ya apuntábamos en relación a Apple y su exitosa comunicación de un valor global en alza como es la sostenibilidad. Apropiarse de un valor global o encarnar una tendencia de la que todo el mundo habla exige un análisis previo pormenorizado de tono y objetivos. De este modo será más fácil minimizar el riesgo de que algo acabe saliendo mal.
La deliciosa jarra helada que ilustra esta entrada es una fotografía cuyo autor es Engin Akyurt. Publicada bajo licencia Unsplash.
No Comments